La ropa que elegimos dice mucho más de nosotros de lo que imaginamos. No solo comunica estilo o tendencia, sino también energía, estado de ánimo y personalidad. En la psicología del color, cada tono tiene un significado que influye en cómo nos perciben los demás —y en cómo nos sentimos nosotros mismos—.
Por eso, combinar bien los colores no es solo una cuestión estética: es una forma de expresarte con autenticidad.
 
¿Qué transmite cada color?
Negro: elegancia, fuerza y seguridad. Es el color que nunca falla. Ideal para looks urbanos, modernos y con actitud.
Blanco: pureza, frescura y simplicidad. Perfecto para transmitir calma o para destacar con un estilo minimalista.
Gris: equilibrio y sofisticación. Es un comodín que combina con todo sin robar protagonismo.
Rojo: energía, pasión y confianza. Si querés destacar o dejar huella, este es tu color.
Azul: serenidad y confianza. Un clásico que siempre comunica tranquilidad y estilo.
Verde: equilibrio, naturaleza y frescura. Transmite una vibra relajada y moderna.
Amarillo: optimismo y creatividad. Ideal para los días en los que querés levantar el ánimo o resaltar un look casual.
 
Cómo combinar tus remeras
Cuando elijas una remera, pensá en el mensaje que querés dar y cómo los colores pueden potenciarlo:
Para un look urbano y seguro, combiná remeras negras o grises con jeans o joggers claros.
Si buscás algo fresco y natural, las remeras blancas o verdes funcionan perfecto con tonos tierra o beige.
Para un estilo atrevido o energético, jugá con remeras rojas o amarillas y accesorios neutros que equilibren el conjunto.
Y si querés mantener un perfil clásico, el azul o el gris son aliados infalibles que nunca pasan de moda.